Manuela Pedraza: La Tucumanesa
por Norberto Galasso*
(Fines del XVIII – mediados del siglo XIX)
Nace en Tucumán. En agosto de 1806, combate duramente a los invasores ingleses, acompañando a su esposo. Él muere en la pelea y ella toma su fusil y da muerte al inglés que lo ha matado. Luego le arranca el fusil, que presenta, después, como trofeo a Liniers. Por esta acción se le otorga el grado de subteniente de infantería. En el informe sobre su actuación, Liniers afirma: “No debe omitirse el nombre de la mujer de un Cabo de Asamblea, llamada Manuela la Tucumanesa (por la tierra de su nacimiento) que combatiendo al lado de su marido, con entereza sublime, mató a un soldado inglés, del que me presentó su fusil”. En su canto a la Reconquista, el poeta negro Pantaleón Rivarola la recuerda de este modo: A estos héroes generosos una amazona se agrega que, oculta en varonil traje, triunfa de la gente inglesa Manuela tiene por nombre por Patria, Tucumanesa. Como suele ocurrir, transcurrido el tiempo, los gobiernos carentes de posición nacional se olvidan de aquella Reconquista – para no perturbar las relaciones con su Graciosa Majestad Británica – y por ende, se olvidan también de quienes defendieron a la patria ante ese inicuo atropello. Así, de Manuela Pedraza poco se sabe, ni siquiera sus fechas de nacimiento y muerte, pero sí que cayó en la miseria y arrendaba una modesta pieza y que por falta de pago, le iniciaron, en dos oportunidades, juicio por desalojo. Alguien se acordó de otorgarle su nombre a una calle, pero la mayoría de los argentinos desconoce el episodio heroico del que fue protagonista.
*N. GALASSO – LOS MALDITOS – Vol. II – Pág. 138 – Ed. Madres de Plaza de Mayo