Dúo Karma en el café Vinilo
El Dúo Karma, la fascinante experiencia musical sin edad que asumen los cubanos Xóchitl Galán y Fito Hernández, estrenará el martes a las 21 en el porteño Café Vinilo el espectáculo “Tiempo luminoso”, primera de tres presentaciones que tendrán su continuidad vespertina los sábados 29 y 6 de diciembre en el mismo reducto.
Con esta serie, la dupla celebra 15 años de actividad, un período que a fuerza de una preciosa musicalidad, le permitió transitar con igual eficacia un repertorio para adultos (como el plasmado en “Mundo sonajero”) y otro para niños (“Vámonos de viaje”).
“Para nosotros, ‘Tiempo luminoso’ es como un tránsito entre lo que hicimos con ‘Mundo sonajero’ y lo que vendrá el año próximo y en donde aparecen temas que hicimos en la Argentina, que tienen que ver con el arraigo, el desarraigo, con un momento que celebra la vida”, sintetiza Xóchitl Galán.
En su departamento del Barrio Norte porteño, la pareja comparte y ofrece mate como una señal inequívoca de dos años de profunda asimilación al país elegido para seguir sonando y andando.
La cantante e instrumentista comenta con una sonrisa que “ahora estamos viviendo más acá y es lindo tener otro lugar donde uno es recibido como en su casa”.
“Nos encanta viajar, estar mezclados, conocer otros acerbos, otras idiosincracias, otras miradas del mundo. Pero la razón por la que lo estamos haciendo esto es porque la respuesta del público es muy linda”, se explaya la muchacha durante una entrevista con Télam.
Y enseguida añade que a la costumbre del mate “y un asadito de vez en cuando”, le suman el encanto por el norte argentino y la vinculación con admirados músicos locales como, entre los citados rápidamente, Liliana Herrero, Luis Pescetti, Magdalena Fleitas, Mariana Baggio, Juan Quintero, Luna Monti, Marita Moyano y Coqui Ortiz.
De aquel tímido desembarco inicial queda el espaldarazo de haber inaugurado los dos conciertos que su compatriota Silvio Rodríguez ofreció en noviembre de 2012 en el estadio Luna Park.
“Fue una de las cosas más lindas que nos pasó en la vida -confiesa- por lo que es Silvio, por la invitación tan generosa y por lo que es el público escuchándolo con tanto silencio, respeto y admiración”.
Su compañero Fito Hernández complementa que “llegamos acá en 2012 con el master de ‘Mundo sonajero’ y la cosa se fue estirando por haber conocido nuevas amistades, nuevas influencias y así nos fuimos enamorando de la estancia”.
La referencia a ese material traza la primera feliz confusión que marca a Karma ya que, indica que “sonajero en Cuba quiere decir llamador de ángeles y no sabíamos que acá es un elemento de los bebés, pero eso operó como una broma del destino porque algunos compraban el disco creyendo que era música para niños”.
Al igual que en la sonoridad que regalan, ella interviene y apunta que el malentendido “fue de esas cosas misteriosas que pasan para que uno se dé cuenta dónde está pisando. Y a nosotros nos encantó darnos cuenta que no queríamos poner barreras entre los repertorios para poder disfrutarlos desde otro lugar”.
Así Dúo Karma pone en escena también el cancionero de “Vámonos de viaje” como un modo de aportar a la contracorriente ya que, Galán advierte que “el arte para niños en general está visto como un arte menor y por más que nuestro país tenga el deseo y la intención de promover la cultura para niños, siempre queda ese preconcepto que lo afecta todo”.
En otra señal que empezó a ligar al binomio con la Argentina, el guitarrista recuerda que “a partir de una de nuestras primeras actuaciones para niños que se llamó ‘Un canto viajero’, a Eva Rubio, una cordobesa que estaba viviendo en Cuba, se le ocurrió reunirnos con Rita del Prado y a partir de allí nos conocimos para montar canciones juntos”.
“Nos fuimos enamorando los tres y apareció una química tremenda y una empatía muy fuerte desde el principio para hacer un trabajo que incluyó presentaciones en el país y fuera de Cuba desde 2006, una peña rodante en 2008 y, finalmente, el disco ‘En Guarandinga por toda Cuba’ en 2010”, enumera Xóchitl.
Y enseguida revela que “nos divertimos haciendo las canciones e imaginando lo que puede pasar con ellas en vivo. Las cosas que dicen los niños y la mirada del niño viendo al adulto jugando, algo que es una sorpresa que disfruta tanto y que es un regalito de la vida”.
Por eso y tras desplegar un “Tiempo luminoso” el martes a las 21, la misma sala de Gorriti 3780 recibirá los sábados 29 y 6 de diciembre, desde las 16, dos entregas de “Vámonos de viaje”.
Y para el futuro inmediato, tras la intención de llevar sus canciones al populoso verano marplatense, Galán anuncia que “queremos empezar a plantear un concierto para bebés y familias embarazadas a partir de un repertorio no convencional, con temas que logran una atmósfera que perfectamente pueden ser cantados de un padre a un niño”.