Una mujer victíma de violecia sexual cada 30 horas
En siete años asesinaron en la Argentina a 1.808 mujeres por violencia sexual. En 2014 se produjeron 277, señala el informe difundido por el Observatorio de Femicidios Adriana Zambrano de La Casa del Encuentro.
«Desde el año 2008 sostenemos este informe porque la la violencia sexual es un problema indispensable en la agenda de los derechos humanos, sin banderías políticas, porque o lo enfrentamos en conjunto o se seguirá llevando vidas», dijo Fabiana Tuñez, titular de la ONG.
En la sede porteña de La Casa del Encuentro -donde además se insistió en un anteproyecto de ley para quitar la patria potestad a los femicidas- se reunieron más de un centenar de periodistas, funcionarias de organismos nacionales, provinciales y porteños, referentes de organizaciones sociales, partidos políticos, sindicatos y universidades, además de familiares de las víctimas.
Las estadísticas del 2014 aportaron también que hubo 29 femicidios vinculados de hombres y niños, tipología que identifica el asesinato de varones que murieron al quedar en la «línea de fuego» del femicida o fueron asesinados para «castigar» a las mujeres.
Como cada año, se repite el dato de que las parejas o ex parejas son los principales responsables de los crímenes y que la mayoría de los hechos, un 52 por ciento, ocurrieron en las viviendas, convirtiendo «un lugar que debería ser de protección para ellas, en el espacio donde son asesinadas», señaló Ada Rico, presidenta del Observatorio.
De las 277 asesinadas, 39 tenían denuncias previas y cuatro poseían órdenes de exclusión del violento, siendo las provincias de Buenos Aires, Córdoba y Salta las que encabezan la estadística trágica.
«Salta es una provincia donde se declaró la emergencia por violencia de género, pero si esa decisión política no se acompaña con presupuesto, programas de contención y refugios, de nada sirve. Por algo son 21 los femicidios allí, misma cantidad que en Córdoba, que tiene una densidad demográfica mayor», analizó Tuñez.
Estos crímenes contra mujeres dejaron a 330 personas sin madre, de las cuales 200 son menores de 18 años.
Si bien los datos «son dolorosos, tenemos que reconocer los avances en el tratamiento de la violencia, porque mucho hemos logrado desde que Carlos Monzón mató a Alicia Muñiz en la década del ’80. Tenemos leyes, dispositivos, la temática visibilizada en medios de prensa y agendas públicas, pero aún nos falta», señaló la titular de la ONG.
Rico contó como dato a analizar que durante julio del año pasado, mes en que se jugó el Mundial de Fútbol, bajaron mucho los femicidios: «No sabemos si porque realmente no ocurrieron o porque la prensa nos los cubrió». Esto es importante ya que el informe, que lo realiza un equipo de más de 10 profesionales voluntarias, se realiza en base a las notas publicadas en 120 medios de todo el país.
Historias de impacto mediático actual como el juicio por la muerte con fuego de Fátima Catán, donde está siendo enjuiciado su pareja, Martín Santillán por «homicidio simple en el contexto de violencia familiar», fueron parte del reclamo escuchado hoy en el lugar mientras se presentaron las estadísticas.
También, los nombres de Rosana Galliano y Marisel Zambrano, ambas víctimas de femicidas condenados -José Arce y Juan Zerda- tuvieron protagonismo durante el acto, ya que los hijos de las dos mujeres viven o son obligados a visitar a sus padres.
Por eso, la organización insistirá este año ante el Congreso Nacional para que debatan su anteproyecto de ley que propone que el hombre que fuera condenado por el femicidio de la madre de sus hijos, según el artículo 80, inciso 11 del Código Penal, quede «automáticamente privado de todos los derechos que conlleva la patria potestad, sin necesidad de tramite judicial».
María Alejandra Lauría, abogada de la ONG, brindó detalles de la iniciativa y explicó que «no se trata de una condena accesoria para el victimario, se trata de una medida de protección civil para los niños y niñas. No es en contra de nadie, es a favor de quienes están desprotegidos ante el femicidio de sus madres».
Los derechos de la niñez están contemplados en la iniciativa de La Casa del Encuentro, que solicita se garantice que los chicos reciban alimento de sus padres, que tengan tutela donde se priorice a la familia ampliada materna, que cuenten con asistencia de equipos interdisciplinarios y asistencia legal especializada.
«La violencia de género no es un tema de mujeres, no es un tema políticamente correcto, es un tema de toda la sociedad, porque si no terminamos con esta situación, si no frenamos los femicidios, jamás alcanzaremos una verdadera igualdad», enfatizó Tuñez.
La Casa del Encuentro es una asociación civil que cuenta con un centro de orientación y asistencia a víctimas de violencia y trata, ofrece espacios grupales de contención y fortalecimiento para quienes viven situaciones de violencia y para sus familiares y amistades, siendo todos los servicios gratuitos.