Ángelo, el ángel de la esquina
La esquina está llena y a la vez vacía. Llega un hombre delgado cargando una pesada mochila, se instala en el pequeño universo de un par de baldosas, saca de la mochila un pedestal de cartapesta, y comienza la metamorfosis. Cambia zapatillas por chinelas blancas, se coloca camisones, un par de alas, pinta su cara de blanco, se coloca gorro, corona y una túnica bordada, sube al pedestal y se convierte en una estatua. Interactúa con los transeúntes, los sorprende, los modifica, les pone un ancla.
Una estatua viva es arte que rompe con la monotonía de lo cotidiano. Y Ángelo se convierte en tapa del VAS porque nos sorprende el ángel surgiendo entre las veredas rotas y mal colocadas, surgiendo de la Ciudad quebrada por la corrupción política. Sorprende la pureza entre la banalidad del mal.
Ángelo Medina, es un artista que “vive y sobrevive a través del arte con el objetivo de servir, enseñar, educar, entretener y sobre todo comunicarse”, dice. Cada tarde se instala vestido de ángel en la esquina de Corrientes y Uruguay. Sorprende, provoca emociones, reparte afecto e intenta despejarnos del individualismo cotidiano. “El Ángel de Luz es un mensajero del amor y la paz. Más que un trabajo de contemplación, como la mayoría de las estatuas, este personaje está en la calle para interrumpir en lo cotidiano de la gente: la idea es hacer que la gente se conecte con lo que está dentro suyo y sacarla del individualismo del día a día”, dice Ángelo entre el mundanal que atraviesa la esquina.
Una niña con su madre, lo mira, algo brilla en sus ojos, algo la encandila, lleva en su mano un papelito con un dibujo recién hecho, se lo alcanza al ángel como si fuera un objeto precioso. Ángelo, le sonríe, agradece con dulzura, luego me dice: “¿Ves?, esto es lo que da energía, amo la calle porque la calle me nutre, por esa mirada vale la pena estar acá”.
“La calle es un eterno estreno, nunca una presentación es igual a otra. Cada persona viene con una sintonía diferente y eso me motiva. Obviamente, tengo un hilo conductor, pero los guionistas son el público mismo”, dice.
¿Cómo nacen los personajes que representás?
-Los personajes aparecen, yo soy apenas un canal de expresión, generalmente son ideas que están en mi cabeza y que leo como una historia que cobra vida a través de mi actuación.
Ángelo comenzó su carrera en su Chile natal, cuando tenía 17 años. En la década del ’90 arribó a estas tierras y se convirtió, junto a Daniela Bocassi, en uno de los intérpretes de estatuas vivas más reconocidos del país. Viajó por Uruguay, Paraguay, Bolivia, Perú y México. Se instaló durante 25 años en Pernambuco (Brasil) y regresó a Buenos Aires en julio pasado, cuando nació su primera nieta. La vocación de trotamundos le viene de herencia familiar, además es la tercera generación de una familia de artistas. Su abuelo era dueño de un circo, su padre fue trapecista y su madre bailarina clásica. “Y yo soy actor, docente, payaso y estatuísta”, dice y agrega, “también trabajo en eventos y con mis personajes”.
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ANGELO MEDINA es director de la agencia de eventos Baúl de Ilusiones.
http://www.baudeilusoeseventos.blogspot.com.ar
E-mail: [email protected]
Celular: 11 1538 828 768
Estatuas vivientes; Personajes Animados; Payasos; Drag Queens; Animación de Eventos; Demostración Productos; Disfraces; Máscaras…
Trabaja su arte a nivel de educación, enseñando teatro y llevando sus representaciones a las escuelas para incentivar la atención de los niños. Tambien realiza palestras sobre vida sustentable a través del arte. Se filosofía de vida se sustenta en 3 erres: Reciclar, Reducir y Reutilizar y en base a esos parámetros construye su proceso creativo.