Los crímenes cometidos en la ex ESMA y la complicidad de los medios de prensa
El Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) definió hoy como “una cuenta pendiente en el proceso de Memoria, Verdad y Justicia” a la investigación de “el encubrimiento” por parte de los medios de comunicación del “plan de exterminio” que llevaba adelante la última dictadura cívico-militar.
Así lo hizo al iniciar su alegato como parte querellante en el tercer juicio oral y público que se realiza en el marco de la megacausa Esma y se sustancia en los Tribunales de Comodoro Py 2002 del barrio porteño de Retiro.
“A pesar de que por canales clandestinos, por lo menos desde junio de 1976 a fines de 1977, se hacía llegar información acerca del plan de exterminio, el modo de informar de los medios fue en sentido contrario con el único fin de respaldar al régimen a nivel nacional e internacional”, postuló la abogada Luz Palma Zaldúa.
En este marco, afirmó que “ el encubrimiento del plan criminal no fue investigado por el Poder Judicial” y sostuvo que, en consecuencia, “representa una cuenta pendiente en el proceso de Memoria, Verdad y Justicia” que se viene llevando adelante.
En este proceso, que investiga delitos de lesa humanidad cometidos en el en el centro clandestino de detención y tortura que funcionó en la Escuela de Mecánica de la Armada, el CELS –como querella unificada- actúa como organismo de derechos humanos y en representación de las familias Mignone, Ferrari, Fidalgo, Tarnopolsky, Lepíscopo y Brodsky, de Graciela García y de Marta Álvarez.
Además, lo hacen en representación de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora; de Abuelas de Plaza de Mayo; de Isabel Teresa Cerrutti, Marina Girondo, Victoria Grigera Dupuy y Ramón Camilo Juárez, integrantes de la Agrupación H.I.J.O.S.- y de los querellantes patrocinados por los abogados Alcira Ríos y Pablo Llonto.
En este tercer juicio de la megacausa Esma se investiga la estructura represiva montada por la Armada en aquellos años y las diferentes etapas que atravesó la represión ejercida desde ese centro clandestino, entre ellas la operatoria de los vuelos de la muerte y la persecución de personas incluso fuera del país.
Según consignaron fuentes judiciales, el alegato del Centro de Estudios Legales y Sociales -en nombre del cual hoy expusieron los abogados Luz Palma Zaldúa y Mariano Gaitán- se extenderá a lo largo de por lo menos cuatro jornadas, además de la de hoy, mañana viernes, el lunes y el miércoles de la semana próxima.
Uno de los casos que representa el CELS en este juicio es el de los secuestros y desapariciones de Mónica Mignone –la hija de Emilio, uno de los fundadores de esta organización– y de sus compañeros en el grupo de la villa del Bajo Flores.
En este proceso, que comenzó hace exactamente tres años, se investigan 789 hechos perpetrados en el centro clandestino de detención que funcionó dentro del predio de la ESMA, por los cuales hay 56 acusados, entre ellos los represores Alfredo Astiz y Jorge “El Tigre” Acosta.
El proceso se encuentra a cargo del Tribunal Oral en lo Criminal Federal número 5 de la Capital, integrado por los jueces Daniel Obligado, Adriana Palliotti y Leopoldo Bruglia.