Papelitos. Un Mundial en tiempos de dictadura
por Mariane Pécora
Entre la fiesta y el horror
¿Existen universos paralelos?, se pregunta Ailín Bullentini en una de las crónicas que escribió para Papelitos. Una investigación periodística de NAN, que deconstruye el Mundial de 1978 desde todas sus aristas: la deportiva, la comunicacional, la organizacional, la de los organismos de derechos humanos, la de las violaciones a los derechos humanos cometidos por el terrorismo de Estado y la del exilio.
Vamos a empezar por contar qué es NAN. Se trata de un colectivo de periodistas que apuesta a la autogestión como modo de producción, comunicación y crecimiento profesional. Nació en la Universidad Nacional de Lomas de Zamora, y durante una década sostuvo una revista digital que tuvo su correlato en 21 ediciones en papel. Este año, junto a Memoria Abierta se sumergió en una investigación periodística que evidencia la disociación implacable entre el mundo de lo público y el submundo del terror que se vivió durante el campeonato mundial de fútbol orquestado por la última dictadura cívico militar en 1978.
Tirar Papelitos
Hace cuarenta años, a la sombra del plan sistemático de represión y desaparición de personas, se jugó en nuestro país la XI Copa Mundial de Fútbol. “¡Tiren papelitos, muchachos!”, arengaba el Clemente de Caloi, la caricatura sin alas ni brazos que por entonces encarnaba, con cierta timidez, la cara rebelde del ser nacional. En paralelo, la dictadura y los medios masivos de comunicación se empeñaban en mostrar al mundo un país donde se respiraba orden, paz y prosperidad. No lo lograron. Y este desacierto se plasma en cada una de las 78 historias que componen la plataforma multimedia Papelitos, un testimonio que desnuda la coexistencia de esta gesta deportiva con las violaciones a los derechos humanos.
“Produjimos 78 historias que desgranan este evento deportivo y descubrimos una hendija más para seguir haciendo memoria, para seguir reflexionando sobre aquella etapa de nuestra historia que atravesó en carne y hueso a varias generaciones y sigue atravesando a muchas otras de manera identitaria”, dice Ailín Bullentini a Periódico VAS.
Papelitos, toda la historia en una palabra
La plataforma multimedia “Papelitos. 78 historias sobre un Mundial en dictadura” (www.papelitos.com.ar) se lanzó el 1 de junio, en el 40 aniversario de la Copa del Mundo de 1978, y estalló tras el elogio en las redes de Diego Armando Maradona. En sintonía con este trabajo, el 15 de junio se inauguró en el Parque de la Memoria “Tiren papelitos. Mundial 78 entre la fiesta y el horror”, una muestra que entabla un diálogo entre arte y periodismo. En tanto, el 28 de junio se inaugura la muestra “El Mundial en la ESMA” dentro del Museo del Sitio de Memoria. Una exhibición que repasa críticamente lo sucedido durante ese campeonato de fútbol.
“El Mundial de 1978 no puede contarse desde una sola arista: fue un evento deportivo que despertó pasión, pero no borró el sufrimiento de las víctimas del terrorismo de Estado ni de sus familiares; un evento del que se valió la dictadura para intentar limpiar su imagen frente al mundo, sin mucho éxito; para eso contó con el apoyo de todo el arco mediático masivo, que no midió servilismo y se volcó de lleno a repetir las mentiras de los genocidas. Aunque hubo medios que dieron cierto impulso a las denuncias sobre las violaciones a los derechos humanos que circulaban en el exilio”, explica Ailín Bullentini.
Volvamos a los universos paralelos. En el Mundial de 1978, los goles se vivaban en las canchas, las calles y hasta en los centros clandestinos de detención, la algarabía ahogaba los alaridos de dolor de la tortura. Las 78 historias de Papelitos profundizan la encrucijada de euforia y horror que atravesó a la sociedad argentina durante ese campeonato.
Mientras el gobierno militar intentó usar el Mundial para mitigar el desprestigio ganado a nivel internacional, los organismos de derechos humanos diseñaron estrategias para visibilizar el horror. Madres denunciando la desaparición de sus hijos y nietos ante la prensa internacional durante rondas en Plaza de Mayo. Madres y familiares adosando miles de volantes a sus cuerpos para introducirlos al estadio monumental y denunciar el accionar represivo. Militantes discapacitados que sostuvieron la resistencia vendiendo banderitas… Estas son algunas de las historias de Papelitos.
Durante los 25 días que duró el campeonato fueron detenidas y desaparecidas 50 personas en todo el país. La estrategia represiva no mermó. Se profundizó. Presos políticos usados de rehenes para salvaguardar la vida de Videla; detenidos-desaparecidos llevados a los estadios a “marcar” compañeros, obligados a hacerse pasar por periodistas, a escribir cables falsos, a falsificar documentos… En Papelitos, Graciela Daleo, sobreviviente de la ESMA, puntualiza “nos utilizaban para seguir la cacería”.
Para destejer mitos sobre acuerdos y complicidades, en Papelitos encontramos los testimonios de César Luis Menotti, Ubaldo Fillol, Mario Alberto Kempes y de los jugadores holandeses que volvieron al país cuarenta años después.
Papelitos documenta las campañas contra el Mundial 78 que se iniciaron en Francia y se extendieron por toda Europa; reseña las interferencias de Montoneros a las emisiones radiales de los partidos; desentraña la estrategia del órgano de inteligencia montado por la dictadura militar en París; analiza el rol de los medios de comunicación que ocultaron el horror para favorecer a la dictadura; relata la suerte que corrieron los editores que honraron la profesión informando la verdad; indaga las internas de la dictadura frente a este campeonato y analiza la actuación del Ente Autárquico Mundial ante el contexto represivo que vivía Argentina.
Papelitos es el relato del Mundial de 1978 desde la mirada de una generación no atravesada por esa experiencia. Periodistas que lograron transportarse a aquella época gracias al aporte de analistas como Pablo Llonto, Paula Canelo y Pablo Alabarces, a los testimonios de ex detenidos desaparecidos como Graciela Daleo, Raúl Cubas y Claudio Tamburrini y a la colaboración de colegas de Córdoba, La Plata y Santa Fe.
Papelitos: contexto actual y legado
“No es fácil trazar un paralelismo entre la actual escalada represiva y la que se dio durante la última dictadura cívico militar. Sí existen similitudes respecto al plan económico y, sobre todo, en el desempeño de los medios masivos de comunicación: volcados a justificar el poder y denostar a los más débiles, víctimas tanto en uno como en otro momento de la historia nacional y de la violencia institucional”, reflexiona Ailín Bullentini, vocera de Papelitos, la periodista afirma que como mujer no deja de sorprenderse de la fortaleza de las mujeres que sostuvieron el reclamo de justicia, memoria y verdad: madres, abuelas, sobrevivientes… “De alguna manera, todas ellas son madres del actual movimiento feminista”, concluye.