3º censo popular de personas en situación de calle
Organizaciones sociales y de derechos humanos realizarán un tercer censo popular sobre personas en situación de calle en la ciudad de Buenos Aires con el objetivo de «tener información fehaciente respecto a cuánta gente» se encuentra en esa condición, dado que, según denunciaron, el relevamiento del Gobierno porteño «subregistra población».
«Dada la decisión del Gobierno de la Ciudad de llevar adelante un nuevo relevamiento de personas en situación de calle que subregistra población y, teniendo en cuenta que además incumplió los compromisos firmados el año pasado, comunicamos la decisión de realizar un nuevo censo popular, para poder tener información fehaciente respecto a cuánta gente se encuentra viviendo en esta situación», señalan un comunicado de prensa emitido por las el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ), el Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), Proyecto 7, Nuestra América y Aires.
En efecto, el 23 diciembre del año pasado la ministra de Desarrollo Social y Hábitat de la Ciudad, María Migliore, anunciaba la firma de un acta acuerdo con organizaciones sociales y organismos derechos humanos, con el objetivo realizar en forma conjunta el censo anual y conformar mesas de trabajo para diseñar políticas públicas que aborden distintos aspectos de esta problemática, dando cumplimiento, así, a lo que instruye la Ley 3706 de Protección y garantía integral de los derechos de las personas en situación de calle y/o en riesgo de estarlo, que obliga al Estado porteño a llevar a cabo un relevamiento anual de esta población, y promueve la participación de organizaciones sociales y no gubernamentales en el diseño de políticas puntuales para este sector.
La alianza feneció de forma inesperada y 11 de mayo pasado, con un inusitado despliegue de móviles, personal y tecnología, el Ministerio encaró en una sola noche y tan solo con la veeduría de la Asesoría Tutelar General, que comanda la ex ministra macrista Carolina Stanley el censo anual de personas en situación de calle. En tanto que la logística y el procesamiento de estos datos quedó a cargo de la Dirección de Estadísticas y Censos porteña.
La semana pasada Asociación Civil Proyecto 7 Gente en situación de calle denunció que los datos oficiales que arroja este nuevo censos oficial no solo se asemejan a los de 2019. Sino que arrojan una cifra un 46% inferior, el censo oficial registra nada más que 1000 personas en situación de calle real.
En 2017, ante la falta de convocatoria de las autoridades porteñas, las organizaciones sociales llevaron a cabo el primer censo popular de personas en situación de calle o en riesgo de estarlo; las cifras que arrojó fueron diametralmente opuestas a las vertidas por las autoridades porteñas. Algo similar ocurrió en 2019: el segundo censo popular dio cuenta de 7251 personas viviendo en situación de calle o en riesgo de estarlo, mientras que el relevamiento oficial reportó 1146 personas.
«El principal motivo por el cual la gente terminó en situación de calle fue la pérdida de empleo, que las dejó sin ingresos para poder pagar el alquiler y esta situación se agravó durante la pandemia», explica el comunicado de prensa y señala que «Según un relevamiento que realizaron el CELS y el IDAES en 2020, el 60% de los hogares inquilinos de la Ciudad tenía deudas de alquiler».
«A pesar de esta situación crítica, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires no implementó ninguna política para contener a quienes podían quedarse sin su vivienda durante la pandemia. Tampoco puso en marcha políticas para garantizar que se cumpla el decreto 320, del gobierno nacional que, entre otras medidas, suspendió los desalojos», añade el escrito.
«En este sentido penas las condiciones sanitarias lo permitan, las organizaciones que trabajamos la temática estaremos desarrollando el nuevo censo con la misma metodología empleada durante los censos 2017 y 2019. Esto implica su realización mediante un barrido territorial exhaustivo realizado a pie por quienes recorren los barrios cotidianamente, durante varios días y no solo de noche. Esto es fundamental para poder entrevistar y tener información específica sobre la situación en que se encuentran y, sobre esta base, diseñar políticas públicas que permitan mejorar las condiciones de quienes no tienen un lugar donde vivir. En el relevamiento del año 2019, también muchas mujeres -incluso embarazadas- mencionaron problemas de violencia por lo cual tuvieron que abandonar su vivienda, visibilizando la ausencia de políticas específicas para esta población».