Instituto Vocacional del Arte en ruinas
El Instituto Vocacional de Arte «Manuel José de Labardén» nació como teatro infantil en 1913 con tres sedes en la zona sur de la Ciudad de Buenos Aires, en los barrios de Constitución, Parque Chacabuco y Parque Avellaneda, pero desde 1958 adoptó su actual formato con tres salas de jardín de infantes y talleres de distintas disciplinas artísticas para niños, niñas y adolescentes de 3 a 17 años.
Los trabajadores de la escuela de formación artística publicaron en las últimas horas un video en las redes sociales de la cooperadora donde muestran algunos ejemplos del deterioro edilicio y reclaman: «Hagamos visible lo que pasa en el IVA, el Instituto Vocacional del Arte está en estado de abandono, gran parte del plantel docente se encuentra conformado por interinos o con horas a término, una situación laboral irregular, ya que hace años no se realizan titularizaciones».
Docentes del Instituto Vocacional del Arte (IVA) de la ciudad de Buenos Aires denunciaron deficiencias eléctricas, humedad en techos y paredes y ventanas rotas en el establecimiento que depende del Ministerio de Cultura porteño y pidieron la regularización del plantel de profesores, frente a lo cual voceros del gobierno de Horacio Rodríguez Larreta aseguraron que se está poniendo en marcha un plan de obras de mantenimiento y mejoras.
Sobre los problemas edilicios y necesidades de insumo en la sede de Curapaligue 1026 (Parque Chacabuco), que fueron registrados en el video, el profesor de Plástica y delegado gremial de UTE Fernando Gutiérrez afirmó que «hay daños que son de antes de pandemia y el más severo es el 10 % de asbesto en un techo de un edificio que da al pasillo del jardín, que supuestamente está encaminado, pero hace años que está».
Gutiérrez también advirtió sobre el estado estructural de los techos: «Se ven los hierros y las humedades que se emparchan pero continúan. Salen en las noticias, vienen a arreglar algo y después queda en nada», se quejó.
«Los enchufes son un peligro, no sabés si te va a explotar cuando enchufás una estufa y toda la instalación eléctrica es decadente», apuntó el profesor de la sede Chacabuco, que además refirió que los estudiantes y docentes sufren el frío porque «las puertas no cierran correctamente, incluso la de los baños».
En cuanto a los materiales e insumos, Gutiérrez indicó que «los instrumentos musicales los arreglan los compañeros o ponemos de nuestro bolsillo para afinar el piano o cambiar una cuerda» y agregó que los materiales de pintura «son muy precarios».
«Así trabajamos, con desidia y el riesgo», lamentó.
Respecto de la situación de la sede de avenida Garay 1684 (Constitución), las imágenes recogidas por los trabajadores muestran ventanas tapadas con cartón, ante la rotura del vidrio correspondiente, y el cableado visible sobre las paredes mientras se informa que dicho edificio no cuenta con calefacción y las instalaciones eléctricas «son precarias».
«Frente a todo esto, nos encontramos sin respuestas de la Dirección General de Enseñanza Artística (DGART) y del ministerio de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires», advierten.
Tras estos reclamos, fuentes del Ministerio de Cultura porteño indicaron que «se está trabajando en un plan de obras que contempla que en el mes de julio se inicie una obra para solucionar la problemática del asbesto allí detectado».
«En cuanto a la infraestructura en general, resultó necesario implementar un sistema de mantenimiento sustentado en decisiones técnico-presupuestarias adecuadas para cada uno de los casos», informaron desde la dependencia y agregaron que se realizaron arreglos de cañerías pluviales y cielos rasos, se pintaron aulas, se impermeabilizaron techos y se cambiaron tableros eléctricos, además de llevarse a cabo «el mantenimiento general de los baños».