Elecciones Comunales ¿Sabrán los vecinos votar?
por Mariane Pécora
La Comuna 1 comprende los barrios de Retiro, San Nicolás, Puerto Madero, San Telmo, Montserrat, Constitución y las Villas 31 y 31bis. Habitan 198 mil vecinos. El próximo 10 de julio, un importante número de ellos, votará la primera Junta Comunal que regirá los destinos de este vasto y disímil territorio, donde el contrate urbano entre los lindantes barrios de Puerto Madero, Villa 31, y Retiro, desnuda la desigualdad social que impera en la Ciudad de Buenos Aires.
¿Sabrán los vecinos votar? ¿Saben qué son las Comunas? ¿Comprenden la importancia de conformar una democracia con sentido participativo? ¿Saben quiénes son los candidatos de su Comuna? ¿Conocen sus propuestas? Demasiados interrogantes, para una paupérrima campaña de difusión de parte del Gobierno de la Ciudad.
Si a este clima de desinformación general, añadimos la unificación de las elecciones y la centralización de las campañas electorales en las figuras de los candidatos a Jefe de Gobierno, obtendremos una gran cantidad de vecinos que ignoran el sentido de la organización comunal, y desconocen quiénes son los candidatos de su propia Comuna.
¿Qué son las Comunas? Son unidades de gestión política y administrativa, creadas con el objetivo de descentralizar administrativamente la ciudad de Buenos Aires. Su funcionamiento, se rige por la Ley de Comunas (1777). Tienen como finalidad promover la descentralización de las funciones del gobierno de la Ciudad a través de la promoción de la participación de los ciudadanos en la toma de decisiones y control de los asuntos públicos, mediante el desarrollo de mecanismos de democracia directa.
¿Quién estará al frente de las Comunas? El gobierno de la Comuna será ejercido por la Junta Comunal, que es un órgano colegiado integrado por siete miembros elegidos en forma directa, con arreglo al régimen de representación proporcional.
La Junta Comunal será presidida por el integrante de la lista que obtenga mayor número de votos de la Comuna. Tendrá un mandato de cuatro años. Los miembros de la Junta Comunal deberán tener dedicación exclusiva, no pudiendo ejercer función rentada alguna, excepto la docencia. Percibirán una remuneración equivalente al 60% del ingreso bruto de un Legislador de la Ciudad. El presidente cobrará un adicional del 10% de la retribución establecida. Y no podrán percibir, bajo ningún concepto, gastos de representación ni viáticos.
Una vez constituida, la Junta Comunal debe convocar a conformar el Consejo Consultivo Comunal, integrado por vecinos, representantes de entidades no gubernamentales, partidos políticos, redes y organizaciones con actuación en la Comuna. Este organismo será de carácter abierto, honorario y participativo.
El Consejo Consultivo Comunal participará en el diseño de un programa de acción y en la elaboración del presupuesto anual de su Comuna, definiendo las prioridades presupuestarias, de obras y servicios públicos. Seguirá la gestión de la Junta Comunal y controlará la ejecución del presupuesto.
Escasas Posibilidades de Participar
Vergonzosamente, desde 1996, que se sancionó la Constitución porteña, ninguna gestión de gobierno se propuso elaborar un Código Electoral para la Ciudad. Por esta razón, en estas elecciones rige el Código Electoral de la Nación, por lo tanto quedan imposibilitadas de competir las listas vecinales. Es decir, los candidatos a comuneros indefectiblemente deben representar a los espacios políticos tradicionales o a los frentes que se han conformado para los próximos comicios.
Demostrada la desidia legislativa a la hora de sancionar un Código Electoral porteño, el Parlamento citadino, hizo gala del oportunismo político: consensuando, oficialistas y opositores, la unificación de las elecciones y sumando a la lista sábana de los candidatos a Jefe de Gobierno y legisladores porteños, las listas comunales. Una contribución más a la incertidumbre.
Esta iniciativa, obviamente, favorece a los postulantes que acompañan las candidaturas de quienes tienen una mayor intención de votos. Y evita que los vecinos comprendan masivamente el proceso y se sumen activamente a la transformación política que significan las Comunas: la construcción de una democracia cercana y participativa en los barrios de nuestra Ciudad.