Creciente rechazo a la derogación de las Juntas de Clasificación Docente
Miles de docentes de diversos sindicatos porteños y de organizaciones nacionales del sector, se movilizaron hoy a la Legislatura de la ciudad en el marco de un paro para rechazar el proyecto que impulsa el macrismo para reemplazar a las Juntas de Clasificación, organismo que designa a docentes y determina su titularización y ascensos.
Los dirigentes sindicales ingresaron a la Legislatura para asisitir a las explicaciones que dió el ministro de Educación Esteban Bullrich ante los dipoutados de la Comisión de Educación, en donde aseguró que las Juntas «no funcionan» y que se trata de un sistema «engorroso y burocrático».
La facultad de las Juntas de Clasificación y Disciplina de designar a docentes en las escuelas, promover los ascensos a partir de concursos y las titularizaciones esta contemplada en el artículo 10 del Estatuto del Docente de la ciudad de Buenos Aires, vigente desde 1985.
La intención del macrismo es derogar ese artículo para quitar facultades a las Juntas y reemplazarlas por una Oficina Única de Clasificación la cual, según el proyecto, estará informatizada y evitará trámites burocráticos para los docentes.
Los sindicatos afirman que a partir de esta reforma «los ascensos y designaciones ya no serán por mérito y concurso sino por el criterio discrecional de funcionarios del gobierno porteño y que en el nuevo esquema los docentes sólo tendrán el papel de gestores».
«No debemos de ninguna manera permitir que se avasalle una conquista histórica iniciada a mediados del siglo XX y que logró a través de órganos democráticos instrumentar un sistema transparente de designación de docentes», dijo la titular de la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (CTERA), Estela Maldonado.
La sindicalista destacó, además, que el Estatuto «es nuestro convenio colectivo de trabajo y no se puede modificar, si no es por el acuerdo de las partes: de los trabajadores y los empleadores» y añadió que le plantearon al Bullrich «retirar el proyecto» e iniciar una diálogo con los trabajadores.
Eduardo López, secretario general de la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE), aseguró que si el proyecto de Macri «garantiza la transparencia estamos en problemas».
«La transparencia se garantiza con un sistema de designación democrática que sigue el orden de mérito irrestricto para nombrar a los docentes en su cargo, mientras que lo que propone Macri es una elección discrecional por parte del poder político», enfatizó.
Fabian Feldman, titular de la Confederación de Educadores Argentinos (CEA) precisó que «el estatuto es una conquista de los trabajadores y los docentes no van a permitir más proyectos a sus espaldas, ya que sólo con su plena participación va a mejorar la educación en la Argentina».
La movilización fue convocada por 15 sindicatos docentes porteños y se sumaron, además de Ctera y CEA, la Unión de Docentes Argentinos (UDA), y la Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica (AMET), mientras que el Servicio de Paz y Justicia que preside el Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel también adhirió al reclamo.
Bullrich ingresó a la Comisión de Educación para explicar a los diputados los alcances de la iniciativa, y allí destacó que «el proyecto está abierto a la discusión, a las alternativas, pero de ninguna manera vamos a retroceder en la idea de implementarlo».
En ese sentido, el funcionario, que concurrió de manera «espontánea» a la Legislatura en medio de una jornada de paro docente afirmó que «la provocación busca desviar el debate» luego de escuchar los reclamos manifestados por los gremialistas y docentes porteños.
«Podría comenzar esta intervención contestando agravios, chicanas y falta de respeto, pero eso sería poco útil», dijo y agregó que la voluntad de su espacio político es dar «un debate clave para seguir mejorando la calidad educativa de nuestros hijos en la ciudad».
El funcionario ratificó su crítica al actual sistema de evaluación docente, que está a cargo de las Juntas, al sostener que «hay 4.400 docentes con cargos para titularizar y ello es justamente porque las Juntas no funcionan».
No obstante, aclaró que en esta situación «también hay responsabilidad del Ministerio», por lo cual justificó la presentación del proyecto de ley que aboga por «mejorar la calidad educativa».
Rechazo al Proyecto en la Legislatura
Diputados de la oposición, gremios docentes y maestros de la Ciudad rechazaron hoy en la Legislatura el proyecto del macrismo que busca derogar las Juntas de Clasificación, encargadas de evaluar a los educadores y designarlos en cargos vacantes.
El pronunciamiento se dio en el marco de la Comisión de Educación de la Legislatura, donde concurrió el ministro de Educación Esteban Bullrich, ante la polémica desatada por la iniciativa que plantea la reforma del Estatuto Docente.
En ese marco, Bullrich aseguró que la reforma que motoriza busca la «mejora en la calidad educativa» y justificó su impulso en que el sistema de las Juntas «no funciona» al punto que «hay 300 docentes cumplen tareas engorrosas y burocráticas, están leyendo legajos y podrían estar frente de un aula».
El expediente en cuestión cuenta con nueve firmas de los legisladores del PRO que participan en la Comisión y del diputado de la Coalición Cívica Juan Pablo Arenaza; en tanto que, de emitirse en un despacho favorable, deberá contar con una mayoría simple en el recinto para su aprobación.
Puntualmente, el proyecto en debate en la Legislatura fue presentado el jueves pasado por dos legisladores del PRO y plantea la modificación del Estatuto Docente con la derogación de las 14 Juntas de Clasificación y su reemplazo por una oficina única de evaluación y designación que dependería del Ministerio de Educación porteño.
Asimismo, el texto contempla la conformación de un órgano con representación docente, de 12 miembros, pero que sólo actúe en los casos de reclamos de parte de maestros que consideren que el puntaje otorgado es incorrecto.
En la reunión de la Legislatura, que se extendió por casi cuatro horas con momentos tensos por los cruces entre el funcionario con los gremialistas y algunos diputados de la oposición, comenzó con duros discursos de parte de los sindicalistas, que consideraron la medida como «un avasallamiento a los derechos de los trabajadores».
Uno de los oradores fue el secretario de UTE, Eduardo López, quien aseveró que «Bullrich quiere disciplinar a los docentes que nos opusimos a que saquen las becas estudiantiles y a las listas de alumnos, pero no nos va a ver arrodillados ante el poder político de turno».
También la secretaria general de CTERA, Estella Maldonado, exigió al ministro el retiro del proyecto y aseveró que «el Estatuto es nuestro convenio colectivo de trabajo y no se puede modificar, sino es por el acuerdo de las partes: de los trabajadores y los empleadores».
«Este proyecto golpea profundamente el estatuto que conseguimos, luego del advenimiento de la democracia», dijo el legislador kirchnerista Francisco Tito Nenna, y agregó que «más que una oficina única de clasificación la iniciativa crea una oficina de recursos humanos al estilo de las empresas».
Aníbal Ibarra, en tanto, consideró que «el objetivo del Gobierno de la Ciudad no es la modernización de las Juntas, sino que pretenden disciplinar a los docentes y manejar desde el gobierno todo el sistema de concursos».