Cooperativismo, autogestión y movimento obrero
En el marco del Día del Trabajador, la Confederación Nacional de Cooperativas de Trabajo (CNCT), señaló a través de un comunicado, que los cooperativistas forman parte del «movimiento obrero» y enfatizó «estamos orgullosos de que la organización de los trabajadores en cooperativas haya permitido la recuperación de la cultura del trabajo, la integración y protagonismo social de sectores populares totalmente postergados, que no hubiera sido posible sin las políticas públicas que se desarrollaron estos años».
«En la crisis terminal que estalló en el 2001 centenares de empresas fueron levantadas por sus trabajadores evitando su cierre definitivo y, luego, la creación de cooperativas de trabajo formó parte de las políticas públicas de generación de empleo a partir de satisfacer de bienes y servicios la demanda del Estado», consigna la entidad en el comunicado.
Además, subraya que, en ese proceso, «los cooperativistas de trabajo hemos proclamado que somos parte del movimiento obrero y que, como trabajadores autogestionados, llevamos adelante nuestras empresas sin olvidar que pertenecemos y somos solidarios con la clase trabajadora».
«Hoy, en nuestro día internacional, los trabajadores de las cooperativas nos sentimos presentes y activos en la búsqueda de soluciones a largo plazo, impulsados por un momento histórico que nos ofrece un lugar destacado, pero que a la vez nos exige lo mejor de nosotros mismos», agrega.
Por otro lado, en el marco del comunicado de prensa, la CNCT destaca la consolidación de «redes productivas por rubro (textil, gráfica, metalúrgica, alimenticia) en el camino del crecimiento estratégico del sector, para construir un futuro sustentable para cada cooperativa de trabajo».
Modelo de gestión empresarial
También, el titular de la Federación Argentina de Cooperativas de Trabajadores Autogestionados (FACTA), Federico Tonarelli, aseguró que, tras una década de trabajo, las empresas recuperadas demostraron que son «un modelo de gestión empresarial en manos de los trabajadores absolutamente posible, viable y sustentable en el tiempo».
«La inmensa mayoría de las recuperadas está cumpliendo los primeros diez años y demuestran que lo que se pensó como una salida de emergencia frente a la crisis, se convirtió en un modelo de gestión empresarial en manos de trabajadores que es absolutamente posible, viable y sustentable en el tiempo», afirmó Tonarelli.
En el marco del Día del Trabajador, Tonarelli aseguró que el continuo surgimiento de nuevas fábricas recuperadas da cuenta de que, «aun en tiempos de recomposición económica, la figura del trabajador autogestionado se convierte en la única herramienta posible para sostener los puestos de trabajo».
«Estamos en un momento en el que hay condiciones para que este modelo siga creciendo en el país y pueda articularse claramente con la clase trabajadoras organizada en gremios y sindicatos», postuló.
Por otro lado, señaló que las recuperadas con mayor antigüedad atraviesan actualmente una «segunda etapa» en la que necesitan «más articulación con las políticas públicas que hay para el sector».
«Hay programas de asistencia, de capacitación, hay posibilidades de acceso a subsidios pero todavía tenemos que articular cuestiones pendientes, entre ellas encontrar una figura para la seguridad social que englobe al trabajador autogestionado en cooperativas en una figura que no sea la del autónomo monotributista», planteó.
Además, subrayó la necesidad de que las empresas recuperadas tengan «más facilidades para el acceso al crédito» y, sostuvo que si bien están «muy conformes» con «la situación actual», aún es un desafío pendiente la «profesionalización de la gestión» de este tipo de empresas «para seguir creciendo».
«Hoy podemos decir que en el país hay dos tipos de empresas: las de capital, que buscan claramente la maximización de las ganancias, y las nuestras, que sostienen el empleo, generan riqueza y la distribuyen de manera equitativa entre los trabajadores», resumió.
En este sentido, sostuvo que, para el trabajador, el modelo de la autogestión «implica hacerse cargo de su propio destino, salirse del marco de la explotación que implica trabajar para otro y demostrar claramente que los trabajadores podemos gestionar empresas».