Denuncian falencias en Colonias de Vacaciones
Ochenta y cuatro de las 110 colonias de verano del programa Vacaciones en la Escuela, del Ministerio de Educación porteño, que funcionaban en la Ciudad de Buenos Aires hasta el año pasado, abrieron el 2 de enero «más superpobladas, con poco personal y falta de materiales didácticos, sanitarios y de higiene», denunció la Defensoría del Pueblo.
El informe de la Defensoría del Pueblo abarca las colonias que dependen del Ministerio de Educación de la Ciudad de Buenos Aires y también a las que están bajo la órbita de la Subsecretaría de Deportes, donde las falencias son de infraestructura más que organizativas.
«Este año abrieron 84 de las 110 colonias del programa Vacaciones en la Escuela que depende del Ministerio a cargo de Esteban Bullrich, a quien ya le enviamos un oficio cuestionando el vaciamiento que padecen las sedes», dijo a Télam Graciela Muñiz, la defensora adjunta del organismo.
En una visita al Jardín 4 del distrito 3, en la calle México al 1600, el jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, habló de 90 sedes en funcionamiento, lo que fue cuestionado por la Defensoría del Pueblo, al señalar que las que abrió fueron solo 84.
«Las seis restantes son las tres hospitalarias (Garrahan, Pedro de Elizalde -ex Casa cuna- y la del Hospital Gutierrez) y los institutos de menores (El Agote, El Roca y ell San Martín) que se abrieron bajo presión de las quejas de los padres y docentes», sostuvo Muñiz.
Según fuentes del Ministerio de Educación porteño, «históricamente la colonia funcionaba en el Hospital Gutiérrez y no el Garrahan, pero por suerte este año los padres nos hicieron notar que era una necesidad abrirla también en el Garrahan, por eso la abrimos más tarde de la fecha de inicio, como ocurrió con los institutos de menores donde hubo problemas de logística».
Hasta el año pasado, dijo Muñiz, «los chicos que iban a las colonias del programa Vacaciones en la Escuela tenían todos los días recreación a la mañana (en la escuela) y pileta a la tarde o viceversa. A partir de ahora, solo tienen pileta dos o tres veces por semana, según el nivel de escolaridad».
Los parques que se utilizan para llevar a los chicos a pileta son el (Parque) de la Ciudad, la Asociación Cristiana de Jóvenes del Bajo Flores, el Club Daom, Parque Sarmiento, y Parque Norte.
«Este año los chicos de nivel inicial van solo dos veces por semana; y los de primaria y especial, tres veces. Pero a algunas sedes les toca ingresar a la pileta dos veces cada día y a otros, solo una», informó Liliana Suarez, asesora de la defensoría.
Para Suarez, que relevó el jardín 4 del distrito 3, visitado hoy por el jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, el ministro de Educación, Esteban Bullrich, y la subsecretaria de Equidad, Soledad Acuña, «esa decisión hace que los chicos de ese nivel escolar vayan solo un rato solo dos veces en vez de toda la semana».
Para la Defensoría del Pueblo de la Ciudad la distribución de los chicos -unos 11.500- «fue caótica y desorganizada».
«Hay sedes desbordadas como la escuela de Ramón Falcón y San Pedrito (Flores), con 300 inscriptos, donde cada una de las 9 parejas pedagógicas (docente y auxiliar) debió hacerse cargo de unos 40 chicos, 15 más que lo reglamentario», dijo Hernán Ceciaga, otro asesor del organismo de control.
En tanto, en otra sede del mismo distrito, en la calle Lautaro al 1400, se recibieron solo 60 chicos, apenas un tercio de los inscriptos previstos.
El informe de la Defensoría detectó además la «falta total de materiales deportivos, didácticos, y de librería».
«El caso más insólito fue una escuela donde concurren 300 niños, adonde llegaron siete lapiceras, dos tijeras y un block de papel de hojas cánson», dijo Muñiz.
También, «escasean los elementos de limpieza y de primeros auxilios, por lo que en algunas sedes los propios padres tuvieron que proveer a sus hijos de papel higiénico».
En cuanto a las colonias dependientes de la Subsecretaría de Deportes, que se desarrollan en 12 polideportivos y grandes parques, entre ellos el Parque Roca, el KDT y el Parque Avellaneda «se repiten la misma deficiencias que en años anteriores».
«Pastos altos; baños sucios; sectores que exponen a los niños a riesgos de lesiones; médicos que realizan las revisaciones al aire libre y no en consultorios médicos adecuados», entre otras deficiencias.