El arte callejero no es delito
Sos de los que quieren que los chicos estén pidiendo guita y comida en las calles
Cerrás las puertas de tu auto falo, cuando los chicos te piden un mango
Cuidado Patri, guarda Ezequiel, cuidado el bolso con cosas de valor
Cuidado Nancy, poné el brazo adentro, de un manotazo te sacan el reloj
Soy su padre y les voy a explicar que piden para no trabajar
No tuvieron la suerte de ustedes de tener un padre como el que tienen…León Gieco – El Imbécil
Artistas y trabajadores callejeros se manifestarán mañana a partir de las 14 horas, frente a la Legislatura de la Ciudad en repudio a la reforma al Código Contravencional que cercena el derecho a trabajar y expresarse libremente en la vía pública.
En un combo que abarca sancionar la violencia y acoso sexual hacia la mujer, proteger del uso del espacio público, evitar ruidos molestos en la vía pública y castigar el al acoso cibernético, Horacio Rodríguez Larreta, giró a la Legislatura porteña un proyecto de reforma del Código Contravencional que agiliza el trámite de multas y penalidades.
Mientras que para el titular del Ejecutivo estas modificaciones buscan lograr una buena y eficiente regulación del espacio público en pos de la prevención y tratamiento de los conflictos urbanos, para los músicos, artistas y trabajadores callejeros se trata de una nueva avanzada contra el derecho a trabajar y expresarse en la vía pública.
“Mediante una reforma del Código Contravencional que pretende aprobar el Gobierno de la Ciudad, se reforzaría el accionar de las fuerzas represivas contra los artistas callejeros. Es una medida más del plan de guerra llevado adelante por el Estado contra los trabajadores, de la mano del acuerdo con el FMI”, señalan en un comunicado los artistas callejeros.
La letra de la Ley
Efectivamente, el proyecto de reforma al Código Contravencional, penaliza las actividades que se realizan en la vía pública, desde el cuidado de coches hasta los considerados ruidos molestos. Según el proyecto diseñado en el comando de calle Uspallata, la protección del uso y goce del espacio público, consiste en un valioso bien jurídico a proteger, por lo cual se sancionará a quienes, sin contar con autorización legal, pretendan brindar servicio de estacionamiento o limpieza de vidrios: «la propuesta de cualquier tipo de servicio de estacionamiento relacionado a lugares de estacionamiento libre y gratuito en los espacios públicos de nuestra ciudad (calles, avenidas, etc.), sin autorización legal alguna, afecta la expectativa al libre uso y disfrute que todos los ciudadanos poseen al circular por las arterias de Buenos Aires. La exigencia coactiva de cualquier tipo de contraprestación podrá, en todo caso, resultar constitutiva de alguna otra figura ilícita contravencional y/o penal».
«En tal sentido, -afirma el jefe de Gobierno- se han constatado maniobras articuladas por sujetos particulares e, incluso, por organizaciones de neto corte delictivo, quienes en oportunidad de la ocurrencia de algún espectáculo masivo de carácter artístico o deportivo, se presentan en las inmediaciones de los lugares de ocurrencia para prestar servicios de estacionamiento en lugares públicos. Estos extremos han implicado la incorporación de agravantes».
«Similares consideraciones pueden llevarse a cabo respecto de la oferta de servicios de limpieza de vidrios de cualquier tipo de automotor en la vía pública, por lo cual se ha incorporado como nueva figura bajo el número 82 bis, contando con los mismos agravantes (…) La intimidación, las amenazas y las peleas entre cuida-coches, limpiavidrios y otros trabajadores en la informalidad también afectan la autonomía física y, en consecuencia, económica de las mujeres», señala el escrito del Ejecutivo porteño, que poniendo acento en el relevante rol que la mujer ha adquirido en este tiempo, aunque desconociendo por completo el sentido de la lucha por la igualdad de derechos.
En otro apartado el Jefe del Ejecutivo, amplia la sanción a cualquier actividad relacionada a pegatinas, fijación de carteles y/o afiches en vía pública. «Si bien existe un ámbito de punición de este tipo de conducta en el derecho infraccional (sic), lo cierto es que la amplitud de bienes jurídicos afectados por esta modalidad de ilícitos requiere una mayor tutela de protección de parte del Estado, razón por la cual consideramos que resulta indispensable brindar la protección que el derecho contravencional ofrece», sostiene Rodríguez Larreta.
«La ocurrencia de estos hechos no solo afectan el espacio público en su visual sino que también ensucian bienes públicos (carteles, luminarias, puestos de diarios, fachadas de viviendas y comercios, rejas, etc.) con el consabido costo fiscal que implica para las arcas del Estado las reiteradas tareas de limpieza que deben ser llevadas a cabo. Por otro lado, y tal como se podrá apreciar en las agravantes de la figura, otros bienes jurídicos de singular importancia se encuentran en juego como en los casos donde se trata de publicidad de oferta sexual en la vía pública», termina diciendo Larreta, omitiendo conocer la complicidad que existe entre las fuerzas policiales y las redes de trata y prostitución en la Ciudad.
Matar al artista callejero
El texto de la reforma propiciada agrega un agravante al tipo contravencional previsto originariamente, incluyendo la figura de ruidos molestos provenientes de la vía pública, y en miras de la mayor afectación al bien jurídico que ello trae aparejado. “En estos casos la acción se establece como pública, sin que dependa de instancia privada ya que la afectación de terceros en la vía pública resulta indeterminada. El caso podrá ser denunciado por cualquier persona, pero la actuación del órgano prevencional (sic) no dependerá de la instancia de algún afectado en particular”.
Esta contravención afecta directamente el trabajo de los músicos y artistas callejeros: “A la precaria situación que vivimos los artistas, se le suma la ofensiva del gobierno para cercenar aún más los lugares donde poder trabajar y ejercer un mayor control sobre la calle y el espacio público”, señalan en el comunicado donde expresan también que: “Los ataques a los manteros y la persecución y arresto de músicos y artistas callejeros en todo el país es moneda corriente y el gobierno pretende recrudecer esta política aprobando esta reaccionaria reforma”.
Efectivamente, de aprobarse esta modificación al Código Contravencional, el Gobierno porteño podrá considerar ¨ruído molesto¨ cualquier manifestación de la música y el arte callejero. Y, como tal, podrá erradicarlo. La reforma del Código de Contravencional sanciona a ¨Quien perturba el descanso o la tranquilidad pública mediante ruidos que por su volumen, reiteración o persistencia excedan la normal tolerancia, será sancionado/a con uno a cinco (5) días de trabajo de utilidad pública o multa de doscientos ($ 200) a un mil ($ 1000) pesos. Cuando el origen de los ruidos provengan de la vía pública la sanción será de dos (2) a diez (10) días de trabajo de utilidad pública, multa de cuatrocientos ($400) a dos mil ($ 2000) pesos o arresto de uno (1) a cinco (5) días.»
Por otra parte, a partir de la modificación del Código Contravencional se aceptarán denuncias anónimas, “lo que es directamente darle vía libre a las fuerzas represivas para arremeter a su antojo contra los artistas que nos encontremos trabajando en plazas, peatonales o cualquier lugar público”, señalan los artistas callejeros. En este sentido la reforma expresa: ¨La autoridad preventora lleva adelante la aprehensión con el objeto de hacer cesar la contravención, para ello ejerce la coacción directa en la medida necesaria para hacer cesar la conducta de flagrante contravención.¨ En pocas palabras este texto se traduce en la criminalización de la cultura y a la represión lisa y llana de los artistas callejeros y el impedimento de ejercer el derecho a trabajar.
Sos un imbécil que a los chicos culpás de la pobreza y la mugre que hay
Que nunca te echen, rogale a tu Dios, porque en el culo te pondrás ese auto
No quiero que me limpien el parabrisas porque está limpio y lo van a ensuciar
No quiero que me pasen esa estampita, de alguna iglesia la habran ido a robar
Soy su padre y les voy a explicar que piden para no trabajar
No tuvieron la suerte de ustedes de tener un padre como el que tienen