El Maquiavélico Macchiavelli
A tan solo 90 días de la elección de Comunas, el subsecretario de Atención Ciudadana porteño, Eduardo Macchiavelli, junto a legisladores del PRO trabaja en un proyecto de ley que aspira a modificar la Ley de Comunas 1777. El mismo, pretende recortar las atribuciones de los miembros de las juntas comunales y eliminar las remuneraciones de seis de sus siete miembros. De esta manera, las atribuciones de la Junta se concentrarían en su Presidente y los otros integrantes trabajarían gratuitamente en funciones de asesoramiento y control que, según la ley vigente, corresponden al Consejo Consultivo Comunal.
Con el argumento de diseñar un modelo de Comuna más ejecutivo y con menos burocracia, los legisladores PRO y el propio Macchiavelli, esperan conseguir 40 votos en la Legislatura para reformar la Ley 1777. “Este proyecto desvirtúa el espíritu de democracia participativa que subyace en la Ley de Comunas”, precisaron legisladores de Proyecto Sur, la Coalición Cívica y Diálogo por Buenos Aires, que adelantaron, que no acompañarán la iniciativa.
La Junta Comunal es la que, según la ley de Comunas 1777, manejará un presupuesto propio que saldrá del General de la Ciudad para responder a las cuestiones barriales. Teniendo en cuenta que el presupuesto general de Comunas puede alcanzar -según la Ley- hasta el 5% del total del presupuesto. Es decir, cada Comuna manejará a partir del próximo año, un presupuesto de alrededor de 92 millones de pesos. Que deber ser aplicado en función de las prioridades que fije cada Junta Comunal en forma conjunta con el Consejo Consultivo Comunal, integrado por vecinos y entidades barriales.
Por lo pronto, Macchiavelli precisó que el Presupuesto 2011 contempla una partida para el pago de salarios, desde el 10 de diciembre hasta el 31, de los eventuales 105 comuneros, y que para los gastos operativos de las Juntas durante esos 20 días, se les transferirán fondos de su subsecretaría. Pero esa partida de salarios no llegaría a ejecutarse si se aprueba el proyecto del PRO.
Al respecto, el legislador de Proyecto Sur, Adrián Camps, manifestó a través de un comunicado de prensa que, “de esta forma el PRO expresa en forma pública lo que siempre pensó: que las comunas debían ser una simple continuidad de los CGPC, con un director electo y no designado a dedo como ocurre en la actualidad. Tras esta idea, subyace la mezquina especulación de obtener para el macrismo, como primera minoría, un número importante de presidencias en las juntas comunales, una fantasía que tampoco están en condiciones de garantizar”. Agregando que “la propuesta del subsecretario Macchiavelli, en función de lo expuesto, solo puede interpretarse como una maniobra para generar confusión entre los ciudadanos, desprestigiar a las Comunas y entorpecer el futuro proceso electoral.”
Lo cierto es que Macchiavelli, con la presentación de este proyecto, estaría violando lo establecido en la Ley 3233 de la convocatoria a elecciones comunales, que en uno de sus apartados establece que: el Ejecutivo debe “Abstenerse de emitir o producir actos que signifiquen intromisión o menoscabo de las funciones de competencia exclusiva de las Comunas o lesionen su participación en las competencias concurrentes”.