La prensa dice ¡Basta!
El Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SiPreBA) denunció la represión sufrida por el fotógrafo Pablo Grillo y otros periodistas durante la marcha de jubilados del 12 de marzo. En un comunicado titulado «Ni protestar ni hacer periodismo pueden poner en riesgo nuestra vida», responsabiliza a Javier Milei y Patricia Bullrich por la violencia, atribuyéndola al «clima de guerra que instala el gobierno». Grillo se encuentra grave tras ser alcanzado por una granada de gas lacrimógeno en la cabeza.
El escrito denuncia que «el enorme y violentísimo operativo de seguridad montado por el gobierno para dispersar, reprimir y criminalizar la protesta» se activó una hora antes del horario previsto en la convocatoria a la manifestación. Al momento en que Pablo Grillo intentó retratar la escalada de violencia, «como lo hicieron históricamente tantos fotógrafos en nuestro país, para denunciar la represión y la violencia institucional», un proyectil de un gas lanzado por las fuerzas de seguridad impactó en su cabeza, dejándolo gravemente herido, en riesgo de perder la vida.
«Sacar una foto, hacer periodismo es nuestro trabajo, nuestro oficio, nuestra tarea en la sociedad y eso no puede poner nunca más nuestra vida en riesgo», señala el escrito y apunta: «Tampoco tendríamos que registrarlo, porque protestar es un derecho constitucional, protegido por las leyes internacionales y fundamental para la vida democrática.
Al igual que en febrero del año pasado, cuando, durante el tratamiento de la Ley de Bases, más de 50 trabajadores de prensa resultaron heridos. Al igual que el 12 de junio de 2024, cuando se detuvo arbitrariamente a más de 30 manifestantes, SiPreBA responsabiliza al gobierno nacional de la violencia y represión ejercida por las fuerzas de seguridad y le exige que afronte las consecuencias.
«No estamos dispuestos a naturalizar la violencia».
Pablo Grillo no fue el único fotoreportero herido. «Hasta la medianoche del miércoles se reportaron 15 trabajadores de prensa afectados por gases, balas de goma, agredidos por las fuerzas de seguridad y algunos por manifestantes en medio de la desesperación y el clima de violencia instalado por la ministra Bullrich». Emanuel Herrera y Guillermo Lepore de Crónica TV, Manu Jove y Matías Rebella de TN, Edgardo Gómez de Tiempo Argentino, los equipos de cronistas y camarógrafos de El Destape y de C5N son algunos de los trabajadores de prensa afectados.
«El gobierno de La Libertad Avanza decidió agredir reiterada y deliberadamente al periodismo, a nuestro oficio y a la libertad de expresión, e implementar un ataque sistemático de las fuerzas de seguridad sobre los trabajadores de prensa en cada manifestación, protesta o movilización que les toca cubrir. Desde la instalación del protocolo antipiquetes de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, desde el SiPreBA llevamos adelante una serie de acciones de denuncia de estas prácticas represivas y persecutorias».
En diciembre de 2023, SiPreBA, junto a sindicatos, movimientos sociales, organismos de derechos humanos y otras organizaciones, denunció el protocolo de seguridad de Bullrich ante la ONU, la CIDH y la justicia federal. Tras las represiones del 31 de enero, 1 de febrero y 12 de junio de 2024 (durante el debate de la Ley Ómnibus), denunció penalmente el accionar policial y, junto al CELS, solicitó medidas cautelares a la CIDH para proteger a periodistas. Asimismo, denunció el vaciamiento y silenciamiento de medios públicos ante la CIDH y la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la ONU, como también el incumplimiento de los estándares de libertad de expresión.
SiPreBA, junto a FATPREN, ARGRA y otras organizaciones, defiende la libertad de expresión y el derecho humano a la información como un pilar de la democracia que el Estado debe garantizar. En este sentido, responsabiliza al gobierno de Milei y a la ministra Bullrich por la represión y exige respeto al derecho a la protesta y al trabajo de prensa.