
Nuevo libro de Stella Calloni
por Marcelo Valko
El viernes se presentó en la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires un nuevo texto de la escritora y periodista Stella Calloni que anteriormente había desmenuzado en “Los años del Lobo” el siniestro accionar de la «Operación Cóndor». Una internacional del terror, donde las distintas dictaduras sudamericanas secuestraban, intercambiaban prisioneros o directamente los ejecutaban por encargos de unos y otros. Actuaban en reciprocidad, canjeando «figuritas» por encargo donde aparecen Pinochet, Stroessner, Banzer, Suarez Mason, Massera y, por supuesto, Kissinger como director de orquesta. Se trató de una gran dictadura global en el Cono Sur, delineada paso a paso desde Washington «golpe a golpe», donde también George Bush (padre), como director de la CIA, dejó un rastro nítido de crímenes.
En esta oportunidad se trata de una novela histórica cuyo título nos habla del eje de una trama que atraviesa nuestra historia: «La cabeza desaparecida de Pancho Ramírez», el caudillo entrerriano que supo ser lugarteniente de don José Gervasio Artigas, Protector de los Pueblos Libres con su mal armada montonera de gauchos, indios y libertos. Como sabemos, la cabeza del caudillo Ramírez le fue entregada envuelta en un cuerpo de oveja al brigadier santafecino Estanislao López, que la mandó embalsamar y meter en una jaula, para luego ser exhibida en lo alto de una lanza. Finalmente, López la enterró en un lugar oculto, llevándose el secreto de su ubicación a la tumba. Stella, durante su juventud en Entre Ríos, supo fascinarse con las innumerables leyendas surgidas en torno a esa cabeza desaparecida que parecía estar en todas partes y en ninguna.
La bella narración que la autora rescata de las brumas y rincones de la historia oficial fue editada por Peña Lillo-Ediciones Continente y se presentó en el stand de Página/12 por el premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel, Luisa Valenzuela y Marta Vasallo y el editor Jorge Gurbanov.
Vale destacar algunos pasajes de los comentarios de Pérez Esquivel, que constituyen verdaderas perlitas a la hora de repasar la historia. Inspirándose en la trama histórica de la novela de Calloni, el Premio Nobel de la Paz indicó que, precisamente, su protagonista fue un desaparecido al que le sustrajeron nada menos que la cabeza. Tras lo cual señaló que en estos tiempos de derrotismo y avance de una neoderecha extrema, la militancia debe acentuar su lucha y no rumiar amargura, para lograr un país federal en lugar del país feudal al que nos ha reducido hoy este desgobierno de Milei. Por otra parte, como mentor del Servicio de Paz y Justicia, no pudo menos que mencionar aquel pedido del Papa Francisco: «¡Hagan lío!».
«La lucha por transformar la realidad se hace con alegría; un militante amargado no es un militante, sino un amargado», enfatizó Esquivel, causando un aplauso del auditorio.
Numerosos lectores y amigos se dieron cita para acompañar a Stella Calloni, una valiente militante social y excelente periodista que debió exiliarse en Dictadura, y que, a sus muy lucidos 90 años, sigue firme pensando y trabajando por una Patria Grande, que llegará más temprano que tarde; que no le quepa duda a nadie. Es lento, pero viene…