La invisibilización histórica de la cultura afro
por Milagros Alonso A 210 años de la prohibición del ingreso de personas esclavizadas al actual territorio de la Argentina, historiadoras y afrodescendientes señalaron que se trató de un paso muy importante para la abolición definitiva de la esclavitud, pero advirtieron que en la construcción de la identidad nacional persisten aún el racismo estructural y la invisibilización histórica de la población africana. «Se prohíbe absolutamente la introducción de expediciones de esclavatura en el territorio de las Provincias Unidas», ordenaba el decreto del 9 de abril de 1812 del Primer Triunvirato. (Leer más…)
Entrevista a Camila Sosa Villada
“Escribo cursilerías sobre las luchas que libran las personas contra la pobreza» por Josefina Marcuzzi Bajo una impronta de delicadeza y sensibilidad y con una pluma soberbia, Camila Sosa Villada, autora de “Las malas”, vuelve a romper todos los esquemas con “Soy una tonta por quererte”, un libro de nueve cuentos en donde retoma la furia travesti y la vida en los márgenes mediante personajes cotidianos que se funden con criaturas exóticas para dar cuenta de los límites que a veces se tienen que transgredir para sobrevivir. «Como soy travesti (Leer más…)
Matemurga arribó a Portugal
por Sergio Arboleya El grupo de teatro comunitario Matemurga lleva a Portugal la singular experiencia barrial que ostenta dos décadas de trayectoria presentándose hoy y el jueves próximo en las ciudades de Faro y Oporto, donde hará confluir a locales y más de una treintena de visitantes para ofrecer su espectáculo “Herido barrio”. El conjunto dirigido por Edith Scher, teatrista, cantante y música, se convierte con este par de actuaciones en el segundo elenco argentino de estas características en llegar a Europa -el anterior había sido el Grupo de Teatro (Leer más…)
Crónicas VAStardas
In media res por Gustavo Zanella Subo. Ni muy lleno ni muy vacío, ni mucho calor ni un frío de cagarse, ni música a los tacos ni silencio de sepulcros, ni sí ni no, ni blanco ni negro. Todo normal salvo la sordera del chofer. Uno pensaría que la combinación de barbijos, más pantalla protectora del bondi, más ruido del motor, más bocinazos justificaría que nadie pueda escucharse. Falacias. El colectivero no escucha porque es medio sordo de verdad. Hay que gritarle. Acerca la cabeza al cortinado de baño transparente (Leer más…)